Euroliga 2023-2024

Madrid, 5 de marzo de 2024

José María Cañas, losojosdeltigre.com

Hace una semana el Real Madrid perdía su primer partido como local esta temporada. Una derrota ante Panathinaikos originada a lo largo de un segundo cuarto en el que los blancos sumaron hasta 7 perdidas de balón que acabaron siendo una losa totalmente insuperable en ese partido. Lo peor es que lejos de corregirse, este hándicap sería aún mayor también en el segundo cuarto ante Andorra del pasado domingo en el que los madridista sumaron ¡once pérdidas de balón! Un numeroso totalmente inasumible que, de no haberse reducido a la mínima expresión en la segunda mitad, hubiera conllevado otra derrota más.

Tras estos dos antecedentes no hay duda que si de algo estará pendiente Chus Mateo en el partido de este jueves ante Fenerbahçe será precisamente de este apartado estadístico. Ante el conjunto turco los blancos no pueden cometer ni la mitad de errores con la pelota que se cometieron en estos dos partidos, ya que los de Jasikevicius han mejorado mucho en los últimos meses y desde la llegada del lituano han ganado 10 de los 14 partidos disputados bajo su mando.

Es por ello por lo que la labor de Chus Mateo estos días tiene que haber sido clara. Las distracciones no tienen que tener cabida en este partido si en vez de podernos meter en un lío (los próximos 3 partidos serán a domicilio) queremos dar un paso de gigantes para asegurarnos cuanto antes la ventaja de cancha.

Madrid, 8 de marzo de 2024

José María Cañas /losojosdeltigre.com

El Real Madrid perdió ante el Fenerbahce en la jornada 28 de la Euroliga. Los de Chus Mateo reaccionaron en la segunda parte pero no lograron culminar la remontada en un partido en el que acusaron la falta de acierto en el triple y el rebote ofensivo contra un rival que se mostró muy regular durante los 40 minutos. El pase al playoff tendrá que esperar una jornada más para el líder de la competición, que hoy tuvo en Sergio Llull al más destacado con 17 puntos.

La igualdad con la que arrancó el partido, con cuatro puntos anotados de la misma forma por ambos equipos (canasta del pívot y dos tiros libres), se prolongó todo el primer cuarto con continuas alternancias en el marcador y un ritmo anotador que fue de más a menos. El Madrid sumó 15 puntos en seis minutos, con 7 de Tavares, pero se estancó ahí. Fenerbahce se fue a 20, con más jugadores aportando, tras un pequeño parcial de 0-5 (15-20, min. 10).

El juego madridista en el segundo cuarto fue un calco del primero. Sergio Rodríguez reactivó el ataque en los primeros minutos y tuvo en Poirier a su aliado habitual, pero luego volvió a sufrir un bajón de energía. Fenerbahce nos castigó con el rebote ofensivo y una defensa llena de trabas, y para colmo tampoco había acierto en el triple. Con el 25-27, los turcos, liderados por Hayes-Davies, abrieron otro parcial para acabar la primera parte 10 arriba (33-43). El Madrid entró con más energía y agresividad en el tercer cuarto. Subió su nivel atrás con una defensa de cambios y anticipación y fue directo en ataque, donde empezó a sumar efectivos. Campazzo, Llull, Hezonja y Yabusele rebajaron la distancia de 11 puntos a 3 en el minuto 26. Parecía que se podía culminar la remontada, pero la cuarta personal de Tavares, y tres triples de los turcos en momentos importantes lo impidieron. La tensión era máxima y se reflejó en una jugada entre Campazzo y Calathes que acabó con una doble antideportiva y técnica para ambos banquillos (58-67, min. 30).

Llull anotó el primer triple del Madrid en el minuto 32 y se convirtió en algo muy complicado recortar puntos a un Fenerbahce que siempre encontró a algún jugador para mantener una distancia superior a los 10 puntos. Además, el conjunto turco seguía ganando la partida en el rebote y eso obligaba a un doble esfuerzo. Aun así, el Madrid, con el capitán tirando del carro, peleó para llegar con opciones a los últimos minutos, pero hoy no le salieron las cosas y la victoria cayó del lado visitante (79-89, min. 40). El domingo, nuevo compromiso liguero en casa frente al Lenovo Tenerife.