Euroliga 2023-2024

Madrid, 14 de marzo de 2024

José María Cañas, losojosdeltigre.com

El Real Madrid está en su peor momento de la temporada. Los blancos han caído en sus tres últimos partidos europeos y ese liderato que parecía asegurado hace un mes, ahora ya no lo parece tanto con un Barcelona en alza y un Madrid que no parece lograr encontrarse.

Y es que, tal y como afirma Chus Mateo, Facundo Campazzo es nuestro termómetro y este parece haber perdido temperatura lo que está derivando en un mal juego y un mal cuidado de balón. Sin embargo, más vale que el argentino logre reencontrarse, el Madrid debe reaccionar ya en Europa para no complicarse y en este próximo partido en Bolonia no estará Sergio Rodríguez —quien ya se perdió el partido ante sus paisanos de Lenovo Tenerife— por lo que el Facu deberá tener aún más galones y más si tenemos en cuenta que tampoco estarán otros dos exteriores como Fabien Causeur o Rudy Fernández.

Estas tres bajas solo una dificultad añadido a un partido que ya de por sí es muy qcomplicado. No en vano, la Virtus ha perdido sólo dos de sus 11 partidos europeos en el Virtus Segafredo Arena, lo que muestra que, pese a no estar en mucho mejor dinámica que los blancos, son un equipo muy difícil de batería en su propia casa.

Es por ello, por lo que los blancos deben olvidarse de todos los problemas que han tenido en estas semanas postcopa y no solamente cuidar mejor el balón, sino estar más atentos al rebote. Si logran controlar eso y tener un porcentaje decente en triples (otro de los problemas en estos últimos partidos) superar esta mini crisis estará mucho más cerca.

Madrid, 15 de marzo de 2024

José María Cañas /losojosdeltigre.com

El Real Madrid se ha reencontraron consigo mismo en el partido que ha disputado este viernes en Blonia. Pese a que su juego no ha sido, ni mucho menos, brillante, los de Chus Mateo sí que han disputado un encuentro muy serio que certifica la ventaja de cancha para los blancos. El Madrid comenzaba algo mejor el partido y con un triple de Yabusele lograba colocarse 7 arriba con apenas 2 minutos disputados. A los de Bolonia les costaba anotar pero también a los blancos que, a debido a sus fallos desde el 6,75, no lograba distanciarse. Sin embargo, sería precisamente un triple, de Abalde, el que colocara a los blancos con diez puntos de ventaja por vez primera (6-16, min.8). Esta interrupción mejoraría claramente a la Virtus que, con un gran movimiento de balón lograba colocarse a solo cinco puntos que, acabarían siendo 8 al final del cuarto tras un triple sobre la bocina de Deck (15-23).

El inicio del segundo periodo sería un intercambio de golpes. La Virtus lograba romper bien al Madrid por dentro pero el Madrid lograba aguantar los empellones locales y un triple de Llull colocaba el +13 poco antes del ecuador de este periodo. Sin embargo, la Virtus volvía a apretar el acelerador y tras un par de errores defensivos de los blancos, ahora era Chus el que paraba el partido (25-34).

Cordinier estaba siendo una pesadilla que solo se lograba apagar tras un encontronazo con Campazzo que acababa con doble técnica y ambos jugadores en el banquillo(con el consiguiente cabreo del argentino que había entrado solo un par de minutos antes). Este cambio inesperado afectaría más a la Virtus que a un Madrid que, con cinco puntos de Musa y un triplazo sobre la bocina de Llull, igualaba su máxima diferencia justo cuando el partido llegaba a su intermedio (31-44).

Un triple de Yabusele colocaba el +16 un par de minutos tras la reanudación, pero lo cierto es que la defensa de la Virtus era muy buena y Cordinier estaba desesperado a un desacertado Campazzo por lo que los blancos no lograban un solo tiro fácil (39-51, min.25). El Madrid sufría de lo lindo para anotar y tenía que recurrir a tiros en último segundo para seguir sumando. Durante la mayoría de los minutos lo lograría y la diferencia volvería a ser de +15, pero un parcial final de 6-0 de la Virtus ,tras varios fallos de los blancos, colocaba la diferencia por debajo de 10 a falta del último cuarto (52-61).

Cordinier dejaba la renta en sólo 7 puntos nada más iniciar el cuarto cuarto, pero dos triples de Hezonja en tres minutos volvían a alejar ligeramente al Madrid (56-69). Sin embargo, sería un espejismo y dos triples consecutivos de Mickey y Dobric volvían a poner el partido en un puño (62-69). Mickey era ahora el problema y la distancia se rebajaba a solo cinco puntos aunque, pasado el ecuador del cuarto, aparecía, por vez primera Campazzo, para mantener a los blancos por delante (68-77, min.37). Banchi pedia tiempo muerto pero este no le serviría de nada. Esta mejora de Campazzo tendría su espejo en un Poirier que se hincharía a meter puntos en estos dos últimos minutos para certificar el primer triunfo blanco a domicilio en Euroliga en casi tres meses (74-89).