Euroliga 2023-2024

Madrid, 24 de abril de 2024

José María Cañas, losojosdeltigre.com

El Real Madrid realizó un gran partido el pasado martes tras el que se colocaba por delante en esta eliminatoria. Sin embargo, ya aquello es pasado. Este mismo jueves se va a jugar el segundo partido de la serie y la obligación de ganar sigue siendo tremenda. Los blancos necesitan, como sea, mantener la ventaja de cancha para ir a Vitoria con una presión mucho menor la próxima semana.

Es cierto que el triunfo del martes fue claro y que los blancos no sufrieron apenas, pero quien se piense que este segundo partido puede ser parecido seguramente se equivocó. Si para el Madrid eds vital ganar, para el Baskonia no lo es menos por lo que el equipo vitoriano saldrá seguro con muchísima más intensidad que en el anterior encuentro y probablemente su acierto desde el perímetro sea mucho mejor que el 12 de 41 que exhibieron el pasado martes. Eso, sin tener en cuenta que aún no se sabe si Ivanovic podrá contar con un Chima Moneke que no pudo participar en la apertura de la eliminatoria.

Es por ello, por lo que los blancos deben evitar cualquier tipo de confianza e intentar e, incluso, mejorar su gran defensa del martes para así evitar cualquier tipo de susto en un partido que, repetimos, es fudamental volver a ganar para mantener la ventaja de cancha antes de ir a Vitoria.

Madrid, 25 de abril de 2024

José María Cañas /losojosdeltigre.com

En Madrid está ya a un solo paso de Berlín. Este jueves los blancos han emulado el primer partido de la serie y han vuelto a ganar con claridad a Baskonia en el segundo encuentro de su eliminatoria de playoffs. Cierto es que en esta ocasión les ha costado mucho más hacerse con el dominio del choque de forma clara, pero cuando, en el final del tercer cuarto, los blancos han logrado por fin romper la barrera de los 10 puntos de diferencia, el partido se ha roto por completo y el Madrid ya ha dominado a placer.

Desde el primer segundo, se vio que el Baskonia pensaba repetir su estrategia del primer partido, lanzar triples tras triple, esperando estar acertado. Sin embargo, a diferencia de en aquel encuentro, los baskonistas contaron con la colaboración de Madrid, que los primeros minutos salió algo dormido —al igual que el marcador del Palacio que hizo parar el encuentro hasta en dos ocasiones. Esto permitió que Baskonia abriera el choque con un 0-6, pero pronto los blancos fueron activándose y gracias al trío Campazzo-Hezonja-Tavares, los blancos pronto lograban colocarse 7 arriba (18-11, min.7). Sin embargo, los Ivanović seguían muy acertados desde el perímetro y, triple tras triple, pronto volvían a igualar la contienda al final de un primer cuarto, que acababa con un ajustado 23-21 en el marcador.

Dos triples de Llull nada más iniciarse el segundo cuarto permitían el Madrid volver a coger los siete de diferencia, pero Marcus Howard no pensaba dejar que los madridistas se distanciaran y amenazaba con aparecer con otros dos triples. Cierto es que, a mediados del cuarto, el Madrid lograría conseguir por fin los 10 puntos de ventaja. (37-27), pero todo sería un espejismo y, merced a un parcial de 0-7, los de Ivanović volvían a igualar la contienda. El Baskonia lograría colocarse a tan solo dos puntos tras un nuevo triple de Chiozza, pero los blancos no se rendían y entre Poirier y Capazzo lograban estirar un poquito poquito la renta y dejar el marcador con seis puntos de diferencia al descanso (46-40).

El tercer cuarto se abriría con un nuevo triple de Baskonia, pero Yabusele no tardaría en responder iniciando un periodo de intercambio de canastas que hacían que la diferencia nunca llegase al doble dígito. Tras un nuevo triple de Howard a los cinco minutos, el Baskonia se colocaría más cerca que nunca(58-54), pero Facu no estaba dispuesto a permitir la remontada visitante y a base de asistencias a Yabusele, los blancos volvían a rozar los diez puntos de diferencia.

El partido parecía a punto de romperse y eso lo harían de nuevo entre el jugador argentino y el francés que, junto a Tavares lo graban en una nueva máxima en el marcador a 20 segundos para el final del cuarto (74-60). Cierto es que un 2 + 1 de Kotsar daba algo de aire al Baskonia justo antes del final del tercer periodo, pero al inicio del cuarto cuarto se vio claro que no era más que la expiración del partido por parte de los baskonistas.

La salida a cancha de Sergio Rodríguez daría un nuevo aire a los blancos que, en el inicio de este último periodo, jugarían como loscomo los ángeles. Ante un baskonia totalmente exhausto, el tinerfeño dirigiría con maestría a los suyos y los mates, las asistencias increíbles y los contraataques se irían sucediendo uno tras otro. La distancia no hacía más que aumentar a falta de seis minutos ya todo parecía decidido (91-68).

Sin embargo, quedaba mucho tiempo y el Madrid, viéndose tan superior, dejó de pisar en el acelerador. Esto lo aprovecharía la segunda unidad del Baskonia, que, triple tras triple, fueron reduciendo poco a poco la distancia, hasta tal punto de que, a falta de 90 segundos, parecían a amenazar con volver a meterse en el partido. (98-88). Pero esa esperanza no duraría y sería un viejo rockero como Rudy Fernández el que no les diera opción de ilusionarse y, con un triple preciso, mataba el partido y dejaba el Madrid a un solo paso de Berlín.